sin perdón
esta es la carta que el hijo de un fusilado durante la Guerra Civil, escribió a su padre. está escrita hace poco tiempo y como recomendación de un psicólogo. el hijo-anciano todavía busca en fosas comunes el cadáver de un padre al que no llegó a conocer.
hablar de placidez enorme en ciertos contextos es algo reservado sólo para las formas de vida más bajas y ruines. señor Oreja, desde aquí el deseo de que su muerte sea lo más duradera, dolorosa y angustiosa posible. el deseo contradictorio de que, al mismo tiempo, usted y los suyos padezcan un sufrimiento tan intenso que les destroce la vida sin acabar con ninguno. no merece más. ni usted ni los que son como usted.
con todo mi desprecio. Hubert
Todo Sangüesa imaginó que Javier había tenido un hijo la mañana que pasaste por el pueblo tocando el claxon de tu moto. Querido papá, soy Roberto, ese hijo que tanto deseabas. Durante dos años, solamente dos años, te dejaron jugar conmigo. No nos dejaron más tiempo juntos el odio, la envidia, la ambición y la locura, que se apoderó de España, en especial de tu querida Navarra, de tu pueblo. Primero, cárcel, 10 meses de cárcel, sin juicio, sin motivo alguno. Después, el asesinato a sangre fría. Pero quiero que sepas, querido papá, que estoy orgulloso de ti, que prefiero mil veces que seas asesinado a que fueras asesino. Solamente te conozco por las cartas que enviaste a mi madre desde la cárcel, pero son suficientes para saber que eras un hombre de bien, que pensabas ser muy feliz con tu familia el día que todo terminase. Pero no te dejaron. Te quitaron la vida...¡por nada! Un abrazo, papá, adiós para siempre.
hablar de placidez enorme en ciertos contextos es algo reservado sólo para las formas de vida más bajas y ruines. señor Oreja, desde aquí el deseo de que su muerte sea lo más duradera, dolorosa y angustiosa posible. el deseo contradictorio de que, al mismo tiempo, usted y los suyos padezcan un sufrimiento tan intenso que les destroce la vida sin acabar con ninguno. no merece más. ni usted ni los que son como usted.
con todo mi desprecio. Hubert
Etiquetas: españa, guerra civil
escrito por Hubert a las 15:31